Santa Teresa o mantis religiosa

Aquí va una descripción de mi animal favorito:

Ninfa de Empusa pennata

Las mantis religiosas pertenecen al orden Dictyopera, y al suborden Mantodea, que tiene unas 2.000 especies de mantis en total.

Pueden comer casi todos los seres vivos de su mismo tamaño: moscas, mosquitos, libélulas, cucarachas, mariposas, polillas, saltamontes, grillos, arañas... Aunque su dieta más habitual suelen ser los saltamontes y las moscas.

Cada semana y media aproximadamente, las mantis mudan su exoesqueleto (coraza que recubre el cuerpo de todos los insectos) para seguir creciendo.

Mucha gente asegura que son venenosas y pican, pero no es verdad. Las mantis son unos animales completamente inofensivos. Si algo o alguien les asusta, se ponen en posición de defensa, levantando las alas para asustar a su atacante con sus vivos colores, pero nunca llegan a picar.

Iris oratoria macho en posición de defensa

La mantis religiosa es conocida por su costumbre de devorar al macho durante o después del apareamiento. Son frecuentes los casos de canibalismo, ya que las mantis ven a sus congéneres como presas y no dudan en atacarlos.
Sin embargo, un apareamiento no siempre tiene este final tan trágico, pues hay casos en los que la hembra no termina con la vida del macho.

Después del apareamiento, que se realiza a finales del verano, la hembra pondrá una ooteca (envoltorio espumoso que protege a los huevos) con más de 100 huevos. Estos pasarán por un periodo llamado diapausa invernal y eclosionarán a finales de la primavera siguiente.

Ooteca de mantis religiosa

Sphodromantis viridis apareándose (la hembra se está comiendo un saltamontes)